Los bosques de la Región de O’Higgins sufren con la acción del hombre

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·       Al celebrarse un nuevo Día Internacional de los Bosques es urgente la necesidad de incentivar la conservación y recuperación de los bosques nativos de la Región de O’Higgins, señala el académico UOH, Alejandro Venegas.

En la Región de O’Higgins el 36% de las áreas corresponden a bosques (590 mil ha aproximadamente) y de ellas, un 78%, aproximadamente, son bosques nativos, que están ubicados tanto en la cordillera de la Costa como de Los Andes. “Sin embargo, cabe destacar que estos ecosistemas presentan una alta presión antrópica, con muchos bosques degradados, y la presencia de solo dos parques nacionales”, señala el académico del Instituto de Ciencias Agroalimentarias, Animales y Ambientales (ICA3) de la Universidad de O’Higgins (UOH), Alejandro Venegas.

En el marco de una nueva celebración del Día Internacional de los Bosques, que fijó la ONU -el año 2012- para el 21 de marzo de cada año, el investigador explica que en la región destaca la presencia de bosques relictos longevos de ciprés de la cordillera y palma chilena, ambas especies en categoría de conservación a nivel mundial; además se cuenta con bosques dominados por especies esclerófilas, que son endémicos a nivel mundial.

Pese a lo preocupante del panorama, Alejandro Venegas destaca que “existen iniciativas privadas de áreas protegidas como el santuario Alto Huemul o el Santuario Cerro Poqui, que son fundamentales para fomentar la conservación de los ecosistemas nativos”.

UOH y los bosques

En este escenario, la Universidad y sus investigadores trabajan en distintos proyectos que, con diversos objetivos, caminan a conservar y proteger los bosques que no solo son esenciales para combatir el cambio climático, sino que contribuyen, significativamente, al beneficio de las generaciones presentes y futuras.

Así, el académico Alejandro Venegas participa en el proyecto (i) Fondecyt Regular: «Evaluación de la resiliencia de los ecosistemas mediterráneo de Chile a las condiciones proyectadas de sequías: un enfoque multiescala», con el que se investigan los efectos de futuras condiciones de sequía durante el siglo XXI en la estructura y función de los ecosistemas leñosos mediterráneos (bosques esclerófilos y caducifolios) en la región mediterránea de Chile. Para ello, se utiliza un enfoque multidisciplinario basado en la hidroclimatología, la teledetección, la dendrocronología, la ecología, la genética y la fisiología de los bosques.

Una segunda iniciativa en la que Alejandro Venegas es protagonista es el proyecto del Fondo de Investigación del Bosque Nativo de CONAF, llamado «Restauración ecológica en vegetación xerofítica: uso de bioindicadores clave para evaluar el éxito de proyectos a corto plazo». Su objetivo es “evaluar el éxito de la restauración activa-pasiva en formaciones xerofíticas a corto plazo en una cuenca altamente perturbada por cultivos agrícolas, basándose en la capacidad de resiliencia de las áreas degradadas, para así maximizar el potencial de recuperación natural del ecosistema”, detalla.

A la investigación del Dr. Alejandro Venegas, se suma la que realiza la profesora asistente del ICA3, Carolina Álvarez. Ella lidera el proyecto «Manejo radicular y mejora en la gestión hídrica durante la viverización: técnicas de producción para impulsar el repoblamiento con especies de interés melífero en la Región de O´Higgins” del Fondo de Investigación del Bosque Nativo de CONAF.

El objetivo de esta iniciativa es abordar la temática publicada por un grupo de investigadores UOH-INFOR que indican que la viverización de especies nativas a nivel nacional es insuficiente para cumplir con los objetivos nacionales e internacionales de restauración ecológica. Este proyecto busca mejorar técnicas de viverización en dos especies arbustivas nativas de clima Mediterráneo con alta tolerancia al estrés hídrico y que pueden ser utilizadas para la producción de miel.

La académica Claudia Rojas detalla otros proyectos que desarrolla la UOH, a través del Laboratorio de Ecología Microbiana y Biogeoquímica de Suelos (LEMiBiS) del ICA3. “Desde el 2018 –y dada la relevancia de los suelos para la salud, la resiliencia de los bosques y la mitigación del Cambio Climático-  se están estudiando los suelos de bosques de tipo esclerófilo, típicos de la zona Mediterránea de Chile, especialmente, aquellos afectados por los incendios forestales”, explica.

Así, y a través del Fondo de Protección del Bosque Nativo del Ministerio del Medio Ambiente (FPA 6-RE-002-2018), se desarrolló en la comuna de Pumanque un Programa de Educación Ambiental, cuyo propósito fue sensibilizar a la comunidad escolar sobre la importancia de los ecosistemas de bosque, contribuyendo en el conocimiento de su entorno, natural, su valoración, cuidado y manejo sostenible.

Otro componente de la misma iniciativa  fue el estudio de prácticas de recuperación de suelos por medio de la utilización de enmiendas de fácil acceso para la comunidad afectada; el conocimiento generado fue difundido a la comunidad escolar de Pumanque, a los agricultores afectados por los incendios y a funcionarios de CONAF.

Asimismo, la Dra. Claudia Rojas lideró el proyecto Fondecyt de Iniciación (11180869) realizado en Pumanque y Requínoa, cuya investigación se enfoca en el entendimiento del efecto de los incendios en la biodiversidad de los suelos, particularmente microscópica, en grupos funcionales microbianos relacionados con el ciclo del nitrógeno y dinámica del carbono en suelos que son parte de bosques dominados por Quillay, Litre y Peumo. El conocimiento generado  permite identificar componentes y funcionalidades del suelo más o menos sensibles a la ocurrencia de incendios, y con eso determinar prioridades a la hora de hacer un manejo de suelos durante prácticas de restauración ecológica, y así, favorecer procesos de sucesión ecológica luego de ocurrido los incendios forestales.

El tema de este año en el Día Internacional de los Bosques es “Bosques y salud” y sus organizadores oficiales: el Foro de las Naciones Unidas para los Bosques, en colaboración con la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO); la Asociación de Colaboración en materia de Bosques, entre otras entidades y agrupaciones, y en la ONU recalcan que “pese a los increíbles beneficios ecológicos, económicos y sociales, los bosques se encuentran amenazados por los incendios forestales, la sequía, las plagas y una deforestación sin precedentes”.